La verdadera motivación es intrínseca y esto implica que las personas se muevan por sí mismas
Es decir, tienen un sentido de misión, disfrutan de su trabajo y se sienten realizados con su labor diaria.
¿Qué puede hacer un directivo para estimular la motivación intrínseca?
- Mejorar la selección e incorporar personas que compartan su cultura de empresa, es decir, su misión, valores y visión.
- Realizar una mejor gestión por competencias y poner a las personas adecuadas en los puestos más adecuadas para ellas.
- Mejorar la información, la comunicación, e invertir más dinero en coaching, mentoring y formación de sus trabajadores, y también en procesos de consultoría.
Los procesos de coaching, formación, mentoring y consultoría nos renuevan la ilusión, la motivación y nos comprometen con aprender, con mejorar, con comunicarnos mejor y con trabajar más en equipo.
Bajo mi experiencia, únicamente el 10% de las empresas sacan verdadero provecho a una inversión en consultoría.
¿Por qué?
Pues sencillamente porque la inmensa mayoría de empresas no están preparadas para sacarle partido a una inversión en consultoría.
¿Por qué?
Pues por falta de formación y preparación de la inmensa mayoría de propietarios, directivos, mandos intermedios y trabajadores.
¿Por qué?
Por qué vivimos en un país que infravalora el conocimiento.
¿Dónde está la vacuna española? ¿Cuántas patentes con aplicación comercial registramos en nuestro país? ¿Quién ha inventado los coches, los ordenadores, o la mayoría de la maquinaria que utilizamos en nuestras fábricas? ¿Quién ha inventado el teléfono? ¿Y la bombilla?
¿Por qué no tenemos ninguna empresa española entre las de mayor capitalización del mundo?
¿Por qué invertimos tan poco en investigación científica, desarrollo tecnológico e innovación? ¿ Por qué tenemos una productividad más baja que otros muchos países?
El adquirir conocimientos mejora nuestra capacidad de análisis, mejora nuestros diagnósticos y nuestras decisiones.
"La teoría sin práctica es inútil. La práctica sin teoría es ciega" Kant.
"Adquirir conocimientos es arar la tierra, aplicarlos es sembrar la semilla" Platón.
Las personas abiertas, aprenden y avanzan. Las personas cerradas, ni aprenden, ni avanzan.
Lo mismo ocurre con los países.
¿Dónde empezó la Revolución Industrial? ¿Dónde se inventó la rotación de cultivos? ¿Dónde se inventaron los abonos químicos?
¿Por qué las mentes más privilegiadas de dicha época se iban a Londres? ¿Era una sociedad abierta? ¿Se valoraba el conocimiento, el talento y la creatividad?